Las aplicaciones terapéuticas más frecuentes de la toxina botulínica son disfonía espástica, dolores de cabeza crónicos por tensión, contracturas de cuello, disfunción de la articulación de la mandíbula con dolor crónico, espasmos faciales, asimetría facial, etc. Si se le compara con una cirugía, es un medio muy eficaz y económico, para frenar el desarrollo de las arrugas que se forman con la edad en las áreas de gesticulación intensa como entrecejo, alrededor de los ojos, frente, alrededor de la boca y para mejorar la expresión facial en general. Sus efectos duran hasta 6 meses. Si se aplica en forma rutinaria evita que aparezcan las arrugas. Si ya se tienen líneas de expresión muy marcadas ayuda a suavizarlas y a que se marquen menos con el tiempo.
Nuestro semblante se ve desgastado y nuestra expresión puede mostrar más edad de la que en verdad se tiene con el paso del tiempo, el daño de los rayos ultravioleta, la mala alimentación y la deshidratación pueden dejar líneas de expresión en nuestro rostro.
Afortunadamente existen nuevos descubrimientos como la inyección de ácido hialurónico, que es una proteína que forma normalmente parte de nuestra piel y que es responsable de su lozanía y juventud. La aplicación de ácido hialurónico debe ser realizada por un médico cirujano titulado y especialista en el procedimiento. El inyectable seleccionado debe ser aprobado por la FDA. Se realiza bajo anestesia local y prácticamente no produce dolor. Sus resultados duran de 1 a 2 años dependiendo la zona inyectada. Se recomienda principalmente para arrugas profundas del pliegue nasogeniano, las que se forman bajo las bolsas de los ojos. Para dar volumen y forma a los labios y para arrugas profundas de expresión en el resto de la cara.
Los ojos son los primeros en sufrir los efectos del envejecimiento: las primeras arrugas siempre aparecen alrededor de los ojos, las patas de gallo se acompañan posteriormente de formación de bolsas debajo de los ojos que brindan una apariencia de desvelo y cansancio.
La cirugía de parpados superiores es muy sencilla, puede practicarse bajo sedación o en casos en que se realicen más procedimientos bajo anestesia general. La cirugía de parpados inferiores (para retirar las bolsas) se realiza bajo anestesia general debido a la manipulación del ojo. Prácticamente no es dolorosa pero puede acompañarse un poco de amor atamiento del área por lo que se recomienda a la paciente que la realice en época de vacaciones. Es una cirugía accesible que quita muchos años y refresca la mirada por años.
Se trata de una cirugía en la que se introducen bajo el tejido subcutáneo diferentes materiales en zonas concretas de la cara para cambiar el contorno o rasgos faciales. Se pueden aplicar en la mandíbula, el mentón, los pómulos, etc. para obtener modificaciones del aspecto físico de una persona.
Anteriormente se colocaban múltiples implantes de silicón en otras áreas de la cara, estos tendían a moverse y verse poco naturales. Por esa razón ahora se prefiere la inyección de grasa para dar volumen. Este procedimiento se puede realizar con anestesia local y su recuperación es rápida y prácticamente sin dolor. Se realiza muy frecuentemente en conjunto con una Rinoseptumplastía para balancear el perfil y destacar aun más los resultados estéticos.